Rincón dedicado a los manuscritos que rodean mi cabeza...

jueves, abril 22

El problema


"Mira, o sea, lee. El problema no es que estés allá y yo acá y de vez en cuando allá contigo también, sin que tu te pases por acá. Tampoco que guardes silencio cuando yo muero porque me hables, digas alguna estupidez o lo que sea. El problema no es tenerte siempre o nunca, que me tengas o no. El problema no es lo que piense de ti, o de mis palabras o de los demás. Del amigo, del primo, del conserje, del quiosquero, incluso del micrero y del mesero. No es que me mires de reojo y no te atrevas a venir si yo no voy. Porque no me importa que estés allá o acá, o que de vez en cuando esté también allá sin que tu pases por acá. Tampoco me importa que guardes silencio cuando yo muero porque me hables. No me importa no tenerte siempre o nunca, ni que me tengas o no. No importa lo que pienso de ti, o de mis palabras o de los demás. Del amigo, del primo, del conserje, del quiosquero, incluso del micrero y del mesero. No, definitivamente no me importa que me mires de reojo y no te atrevas a venir si yo no voy, porque el día que yo quiera huir será mucho más fácil para mí. El problema hoy, caballero, es el centro, la tercera arista del triangulo, la pieza que no calza pero se ve bonita. El vacío los días después y la última escena incomoda en la que participé. Ese, ese mi querido amigo es el problema. Me sacaste de mi lugar."

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