Rincón dedicado a los manuscritos que rodean mi cabeza...

martes, diciembre 14

De un día lunes...

















Hoy se trata de mi...



A veces es bueno tener un susto. Te remesen el presente, te "revuelven el gallinero" y al final estas parada frente a todo, los pro y los contra, los fantasmas y los reyes. A algunos, los menos valientes e ingenuos, los paralizan y hacen echar marcha atrás. Se ciegan, pierden el sentido y se rehúsan a caminar por el mismo camino. Pero hay otros, y son los menos, perros callejeros que apretamos los dientes, nos armamos de valor, de ese que hemos conseguido en el camino y nos enfrentamos. Esto nos permite caminar tranquilos, no con seguridad, pero si en calma. Porque sabemos quienes somos, sabemos donde estamos y cuanto nos ha costado llegar. Y no permitiré que nadie me robe las sonrisas, que nadie me quite lo que tengo, ni lo que soy. Porque solo los que han masticado el polvo saben lo que es caminar de pie. Porque solo los que han llorado saben lo que es reír. Solo los que han pasado hambre saben lo que es pelear por comida y el sabor que esta tiene.
Somos parte de la historia que no quisimos, pero no nos debemos avergonzar. Porque al final de cuentas, somos lo que somos gracias a ella...

(Después de todo lo dicho me permitiré hacer un par de confesiones:
- Cada vez que algo me sacude escribo. Y no es que tenga la maldita necesidad de contar todo lo que me pasa, esto me calma (y créanme que es mas de lo que se pueden imaginar...) y compartir vivencias de vez en cuando puede ser bueno...
-Necesito plasmar estas cosas aquí, así cuando me sienta igual, recordaré de donde vengo... lo que podría ser una terapia. Llámenlo como quieran, esto me encanta.!)








Finalmente no hay peor error que del que no se aprende...
Yo.

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